Si bien el nuevo gobierno de Uruguay lleva solamente dos meses en funciones, el atraso en definir las integraciones de los organismos internacionales han encendido las primeras alarmas.
La región vive momentos de cambios, de toma de decisiones y en los ámbitos de discusión Uruguay está ausente en estos tiempos o, al menos, su presencia está diluída.
Los atrasos en asuntos de canales, pérdida de competitividad de los puertos en el litoral oeste del país y falta de discusión sobre los mismos, no pueden atribuirse al gobierno actual, comandado por el presidente Yamandú Orsi. Pero, sin embargo, lo que sí preocupa en el sector, y pone el foco en el actual gobierno, es la lentitud y ausencia en este ámbito.
Según distintos actores consultados por ComexLatam, la demora en los nombramientos tiene consecuencias y la preocupación es creciente en el ambiente relacionado con la Hidrovía Paraguay-Paraná cuando se entiende el riesgo al que se exponen la actividad de los puertos uruguayos y las futuras inversiones del sector.
Si bien en algunos casos hay nombres trascendidos, lo cierto es que faltan designaciones y confirmaciones.
A la incertidumbre referida se suma la falta de confianza que han generado algunas delegaciones uruguayas en organismos binacionales, como las comisiones administradoras del Río de la Plata (CARP) y del Río Uruguay (CARU).
En este escenario, se entiende que son momentos en que se están jugando cartas fundamentales que tienen que ver con, por ejemplo, el destino del canal Martín García, cuyo tránsito se ha visto encarecido por una redefinición de zonas en el Río de la Plata.
En Argentina hay voces expertas que manifiestan que el canal Martín García debe ser desarrollado de manera seria y dejar de ser considerado solamente como una vía alternativa. Sin embargo, Uruguay no aparece en estas discusiones y desaprovecha la coyuntura.
En medio de este panorama, también ha quedado despoblado el directorio de la Administración Nacional de Puertos (ANP) tras la renuncia de la vicepresidenta Alejandra Koch, luego encontrarse irregularidades vinculadas con conflicto de intereses (ver ComexLatam Revista, página 4).
En primera instancia la ministra de Transporte y Obras Públicas, Lucía Etcheverry, hizo dar marcha atrás el ascenso de la pareja de Koch, pero luego de otras irregularidades denunciadas por la prensa llevaron a la renuncia de la funcionaria.
Etcheverry aceptó la dimisión y solicitó tiempo a Presidencia de la República para designar a su reemplazante.
Asimismo, falta nombrar el tercer lugar del directorio, que corresponde ser ocupado por la oposición.
Ver artículo completo en ComexLatam Revista, página 12.