Un nuevo proyecto de infraestructura promete transformar la logística del comercio en Sudamérica: el Corredor Ferroviario Bioceánico Central, una línea férrea que conectará Brasil, Bolivia y Perú, con el respaldo de una inversión multimillonaria de origen chino.
Según informó el medio El Imparcial, la obra busca crear una vía directa entre el océano Atlántico y el océano Pacífico, partiendo desde el puerto de Santos en Brasil y culminando en el puerto de Chancay, en Perú. Esta conexión permitiría agilizar el transporte de mercancías hacia el mercado asiático, compitiendo directamente con el canal de Panamá.
El megaproyecto contempla una inversión estimada en 3.500 millones de dólares, proveniente de empresas chinas interesadas en fortalecer su presencia estratégica en la región. El objetivo es reducir costos logísticos y tiempos de envío para productos clave como la soja, el maíz y el azúcar.
La iniciativa fue relanzada tras los acuerdos alcanzados en 2023 entre los presidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Xi Jinping, quienes reafirmaron su compromiso con una cooperación más estrecha en infraestructura, tecnología y comercio.
Además de sus implicancias económicas, el corredor representa un paso importante hacia una mayor integración regional, al vincular de forma más eficiente a tres países sudamericanos y ofrecer una alternativa estratégica al tránsito de mercancías a través del canal de Panamá.
De concretarse, el Corredor Ferroviario Bioceánico podría convertirse en uno de los proyectos más relevantes de las próximas décadas en América Latina, redefiniendo el mapa del comercio entre Sudamérica y Asia.