El Senado de Estados Unidos aprobó una resolución para poner fin a los aranceles impuestos por la actual administración de Donald Trump sobre las importaciones procedentes de Brasil, en un inusual gesto de consenso bipartidista.
Las tarifas, de hasta 50 %, fueron aplicadas en julio de 2025 bajo la declaración de una “emergencia nacional”, con el argumento de que el proceso judicial contra el expresidente brasileño Jair Bolsonaro representaba una amenaza para la seguridad estadounidense. La medida afectó productos clave como el café y la carne vacuna, generando tensiones en un intercambio comercial que supera los 40 000 millones de dólares anuales entre ambos países.
La resolución, impulsada por el senador demócrata Tim Kaine, fue aprobada el 28 de octubre con 52 votos a favor y 48 en contra. Cinco republicanos —Lisa Murkowski, Susan Collins, Mitch McConnell, Rand Paul y Thom Tillis— se sumaron a los demócratas para apoyar la iniciativa. Sus promotores argumentan que los aranceles actúan como un impuesto adicional para consumidores y empresas estadounidenses, y que la declaración de emergencia no tiene una base económica ni de seguridad sólida.
Aun así, la medida enfrenta obstáculos. La Cámara de Representantes, controlada por los republicanos, aprobó una norma que bloquea la revocación de los aranceles hasta marzo de 2026, lo que deja la resolución en suspenso.
De concretarse, la eliminación de los aranceles aliviaría la presión sobre los exportadores brasileños y podría fortalecer la cooperación comercial entre Washington y Brasilia. Para Estados Unidos, sería además un gesto de apertura hacia un socio estratégico en América Latina y una señal de división dentro del propio Partido Republicano respecto al rumbo de la política comercial del presidente Trump.
Fuente: Reuters.