Uruguay atraviesa una transformación acelerada en su parque automotor, impulsada por un cóctel de factores que está inclinando cada vez más a los consumidores hacia los vehículos eléctricos. Con el precio de la gasolina por encima de los 7 dólares por galón y un esquema robusto de incentivos fiscales, las ventas de autos totalmente eléctricos se disparan y posicionan al país como referente regional en la transición hacia energías limpias.
Según un informe divulgado por Bloomberg, este fenómeno está modificando de forma estructural el mercado automotor uruguayo, donde las marcas chinas avanzan con fuerza en un escenario tradicionalmente dominado por compañías estadounidenses y europeas. Ken Parks, periodista especializado, destaca que Uruguay se ha convertido en uno de los mercados más dinámicos de América Latina para la movilidad eléctrica.
Incentivos fiscales y gasolina cara: la combinación que aceleró el cambio
El gobierno uruguayo lleva años promoviendo la incorporación de vehículos eléctricos mediante la exoneración de varios impuestos que encarecen la importación de autos convencionales. Estas exenciones reducen de forma considerable el precio final para los consumidores, que encuentran opciones cada vez más competitivas frente a los vehículos a combustión.
La coyuntura se complementa con uno de los precios de gasolina más altos del continente. Con un costo que supera los 7 dólares por galón, muchos consumidores están optando por migrar hacia modelos eléctricos, cuya eficiencia y menores costos de operación resultan especialmente atractivos en el mercado local.
Una red de carga en rápida expansión
Otro de los factores decisivos ha sido el desarrollo de una red nacional de puntos de carga que hoy cubre la mayor parte del territorio. Los avances en infraestructura permiten que los usuarios utilicen sus vehículos eléctricos en la vida cotidiana sin enfrentar las barreras de disponibilidad que suelen afectar a otros países de la región.
Uruguay fue pionero en desplegar una red pública de cargadores, mayoritariamente gestionada por la empresa estatal de energía, lo que ha otorgado confianza a los consumidores y fortalecido la adopción.
El mercado: dominado por las marcas chinas
Las cifras actuales muestran un crecimiento sin precedentes: cerca del 25% de los autos y SUVs nuevos vendidos en Uruguay son 100% eléctricos, más del doble respecto al año pasado. Este porcentaje supera ampliamente a economías con mercados automotrices más grandes como Brasil, Chile y Colombia.
En esta ola expansiva, las marcas chinas han logrado posicionarse con contundencia. Fabricantes como BYD, Haval/Great Wall (JAC), Omoda – Jaecoo y otras marcas del grupo Chery lideran las ventas gracias a su combinación de precio accesible, autonomía competitiva y tecnologías modernas.
Tesla, por su parte, tiene presencia marginal. Existen algunos cientos de vehículos circulando en el país, pero la empresa no cuenta con representación oficial en Uruguay, lo que limita su alcance comercial.
Un país estable y energéticamente limpio
Uruguay no solo destaca por su adopción de autos eléctricos, sino por el ecosistema energético que los alimenta. Más del 98% de la energía eléctrica generada proviene de fuentes renovables, principalmente eólica, hidráulica y solar. Ese respaldo convierte al país en uno de los pocos del mundo donde un vehículo eléctrico funciona prácticamente sin generar emisiones indirectas.
La estabilidad política, la seguridad jurídica y las políticas sostenidas en materia energética han permitido que Uruguay se consolide como un caso de éxito en la transición hacia una movilidad más limpia y eficiente.